Mirando la misma Luna

Bajo el mismo cielo estás, estoy...
mirando la misma luna
sintiendo el mismo viento
y al amanecer la bruma.

A pesar de la distancia
tu presencia conmigo está
la percibo en tu sentir
la asumo en tu pensar.

Y en cada suspiro que exhalo
tu nombre surge despacio
entre sonrisa y momento
entre una frase e intervalo.

Y me golpetea el corazón
con un leve toque amoroso
que a veces está gozoso
y otras veces querendón.

Y en ese vaivén de nostalgia

mi ser clama tu presencia

que me abraza y en esencia

disminuye la distancia.

Para mirarte a los ojos

para escuchar tu sonrisa

para besarte despacio

profundamente sin prisa.

Para enredarme en tu pelo

y recostarme en tu pecho,

para envolver de ti

y para amarte de hecho.

¿Cuánto cuesta un beso?

Cuánto cuesta un beso?
hacer un ejercicio con los labios

para depositarlo en otra boca

con cariño y embeleso?

Utilizar la fuerza del amor

para dulcemente presionar

los labios y besara

a quien se quiere amar?

Acompañar las caricias

cuando piel con piel

se toma, se da, sin prisas

con sabor a miel?

No, un beso cuesta:

momentos de complicidad

horas de nostalgia, 

días de deseos, 

meses de cariños y 

eternidades de amor.

Languidez

En el fondo de mis recuerdos,

se acurruca en la nostalgia
se alimenta de suspiros,

se transpira en aspavientos.

Cual lánguida libélula

que deambula entre los lirios,

vas y vienes en vaivén

fluyendo en atavíos.

No le niego su existencia
porque me sonríe cada día.
porque con inmensa paciencia,
mitiga suavemente el vacío...

De la experiencia vivida,
de la alegría expresada, 
de la ilusión complacida
y de la decisión tomada.

Sentimiento expresado en verbo
que continua en acción precisa,
que no abandona el sentir pasado
y que con fe cada día inicia...