Hay una gran desolación
dentro del pecho que oprime
una abominación que lastima
como un dolor sublime
Que produce lágrimas,
un mar sórdido de llanto
con versos y rimas
con la tristeza de un canto...
Es el sentir tu ausencia
aunque tú estés aquí
si, una nula creencia
de que aún vives en mi.
Te amo, tú lo sabes
pero no puedes a mi venir
y con esas palabras suaves
mil melodías me hablan de ti
De tu querer y no poder
en plena conciencia conmigo
de tu deseo de permanecer
y que me resguarde a tu abrigo
Hoy me he decidido
no más promesas incumplidas
no más cosas sin sentido
ni autoestimas agredidas
No quiero padecer ausencias
ni incertidumbres ni dudas
ni tampoco las angustias
de situaciones absurdas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario