Decidí...

Decidí amarte…
Después de enamorarme de ti,
luego de conocerte, sentirte, apreciarte
ya no era cuestión de feromonas
sino de decisiones razonadas.
Tú eres lo que yo quiero, adoro tus defectos
tu mirada clara y penetrante, esa sonrisa que cautiva
y esos brazos que aprisionan…

Decidí quererte sí…
Porque también amo tu voz, tu manera en que te das a los demás
esa lealtad que tanto te caracteriza y que permite se aprovechen de ti
y que me hace enojar y que me provoca ternura,
por esa nobleza de alma que tienes y esos sentimientos tan bellos.

Decidí desearte…
Por la pasión que destila tu piel, tu boca y tu aliento,
tus manos y tu masculinidad; te hacen un ser sensual
que me seduce y me enamora, cada día y cada momento.

Decidí ser uno contigo
Y hacerte promesas de amor eterno porque así lo quiero,
porque es mi voluntad, porque lo decidí así…